Care Rooms: enCouraging Bravery

Nuestras Salas de Cuidados fomentan la val entía convirtiendo lo que a menudo es el entorno más aterrador para un niño hospitalizado -la sala de tratamiento- en un entorno atractivo y cálido, que permite al paciente afrontar con fuerza los procedimientos dolorosos e incómodos. Cuando se utilizan equipos médicos, como los ultrasonidos portátiles(lea más en butterflynetwork.com), los niños no quieren sentirse asustados, por lo que la creación de este ambiente acogedor puede relajarlos mientras se administran los exámenes.

"Hay momentos en que nuestros pacientes pediátricos necesitan someterse a procedimientos dolorosos", dijo Gloria Mattera, Directora del Departamento de Vida Infantil y Servicios de Desarrollo del Centro Hospitalario Bellevue.

"Nuestro personal de vida infantil ofrece preparación y apoyo, mientras que nuestra sala de cuidados enCourage proporciona un ambiente hermoso y relajante para minimizar el miedo y la ansiedad durante esos momentos estresantes. Nuestra temática submarina da el tono adecuado a los niños, adolescentes, padres y al personal".

"Su capacidad para sintonizar realmente con lo que los niños necesitan y lo que marca una diferencia en sus vidas es realmente muy valiosa", comparte AnnMarie DiFrancesca, Directora del Programa de Vida Infantil y Terapias Creativas del Centro Médico Infantil Cohen de Nueva York. "Y las Salas de Cuidados realmente llevan un ambiente de hospital monótono a algo que es más amigable para los niños y menos aterrador".

Incluso ofrecen apoyo antes de que se completen, como en la recién inaugurada Sala de Cuidados en el Centro Médico Regional de Orange.

Según la terapeuta de vida infantil Michelle Ferguson "había un niño cuya madre me buscó porque su hijo había estado expresando su temor de venir al hospital para un procedimiento. Nos conocimos y le di un recorrido por el hospital, hicimos una obra de teatro médica y hablamos de diferentes cosas que le preocupaban".

Michelle decidió mostrarle la nueva Sala de Cuidados para que viera cómo hacían que el hospital fuera menos temible para los niños.

"Al entrar en la habitación, nuestro pintor estaba haciendo globos de aire caliente. En ese mismo momento pintó al niño y a su madre en el globo y estaba eufórico! Mientras observaba esta hermosa interacción entre ellos, ya no vi a un niño temeroso sino a alguien que había recuperado la sensación de comodidad y confianza en este entorno desconocido".